lunes, 6 de agosto de 2012

Democracia Digital. Nuevas Tecnologias y sistema electoral


Álvaro Pérez realiza su análisis alrededor del elemento de la democracia digital o tecno democracia (su consolidación) como un factor innovador para el sistema político actual. Para lograr dicha consolidación el crecimiento tecnológico debe darse de manera tanto general como amplia para que el total de la sociedad pueda hacer uso de todos los nuevos mecanismos y herramientas. A su vez afirma que el paso de lo que se puede considerar el sistema político actual o la “democracia tradicional” a la tecno democracia será inminente, expone que ya el avance tecnológico en los últimos tiempos ha sido tal (tanto en velocidad como diversidad) que sencillamente aplazar o tratar de detener su avance resulta imposible, para este momento se empezara a trascender los espacios físicos como exclusivos para la participación política para que los individuos comiencen a llenar los espacios virtuales. El autor indica además que para lograr que esto último se logre las herramientas de comunicación deben pasar a una forma más interactiva, entendiéndolo como el hecho de que el individuo no se convierta únicamente en un receptor universal de información sino que el mismo también se encuentre en capacidad de crear y compartir tanto con otros usuarios como con su propio gobierno (administración pública) de modo que la inclusión de nuevos mecanismos digitales reemplacen procesos de carácter exclusivamente físico para la mejora de la sociedad.

            La búsqueda central de este proceso de modernización de la democracia o cambio del sistema con la inserción de estos nuevos mecanismos y nuevas herramientas de carácter digital consiste en el mejoramiento o el facilitar distintos procedimientos definidos como propios de la democracia como podrían ser aquellos típicos de la esfera electoral; realizando a su vez una mención de que inevitablemente habría que compartir espacios con elementos mas tradicionales dentro del sistema de participación como lo son los partidos políticos.

            Expone también como un gran beneficio de la digitalización de las diferentes herramientas de participación el carácter de retroalimentacion que poseería, anteriormente se menciono que el usuario no debía ser únicamente receptor; eso viene dirigido a este punto ya que al ser tanto receptor como emisor, el usuario se nutre cada vez mas de toda la información y debates que se generan capacitándose el mismo a cada momento para mejorar la utilización de todas estas nuevas herramientas digitales.

            En conclusión, Alvaro Perez plantea una perspectiva muy interesante en cuanto a ese elemento denominado tecno democracia debido a que expone un cambio en el mismo sistema político que significaría un gran avance para la participación política asi como también al acceso a la información y ampliación de los espacios de participación, el uno gran contra que resulta tras este análisis recae en la educación, entendida como la instrucción de los individuos en el manejo y el acceso a los nuevos mecanismos y herramientas digitales y que a su vez resultaría también interesante un planteamiento de cómo llevar acabo dicho plan de educación con respecto a la plataforma digital.

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